El martes 21 de febrero realizamos la visita a este importante monumento de nuestra ciudad. Como todos los años en este mes y dentro de la programación que sobre Andalucía realizamos, incluimos una visita para conocer nuestro patrimonio histórico. Como decimos siempre lo que se conoce se quiere, y lo que se quiere se cuida y respeta.
El autobús nos dejo frente a la puerta trasera del edificio, andando nos dirigimos hasta la entrada principal en la que nos esperaban tres monitor@s para acompañarnos en la visita.
Al entrar nos encontramos con la escultura en piedra de un señor muy serio que poco a poco descubrimos que era un rey, pues tenia corona; de Castilla y León pues tenía un castillo y un león en su capa y a demás portaba un libro en una mano por eso supimos que era el rey cristiano Alfonso X llamado el sabio que inició la reconstrucción del edificio que estaba muy destruido después de la guerra con los árabes que antes que ellos ocuparon estas tierras. Antes de los árabes la ocuparon los romanos que hicieron este edificio como atarazana para intercambio de los productos que llegaban por el rio y del que fue encargado un romano que más tarde se hizo mundialmente famoso: Julio Cesar.
Nos paseamos por pasillos con bustos y estatuas además de sarcófagos y otros objetos pertenecientes a las distintas épocas y pueblos que pasaron por él. Llegamos al salón de los mosaicos una sala amplia con una cúpula y que anteriormente fue una iglesia. Esta sala está cubierta con mosaicos romanos que encontraron en la corredera y que en un trabajo ingente y de “chinos” trasladaron los puzles hasta aquí.
De esta sala pasamos a los baños árabes nos contaron las distintas salas que había: de agua fría, templada y caliente. Estaban un poco viejos y vimos que no se parecen a los nuestros pues no tienen ducha ni bañeras.
Finalmente salimos a los patios y jardines. Uno con “piscinas” y fuentes de mármol blancor muchas plantas desde el que se veía la torre de vigilancia y las almenas de la muralla del castillo por la que se paseaban muchas personas visitantes del Alcázar.
A través de un patio con una fuente central salimos a los grandes jardines llenos de chorros de agua y flores. Pasamos a los jardines reales que acababan en una escultura de los reyes recibiendo a un señor que nos dijeron que era Cristóbal Colón que le pedía dinero para construir sus barcos para salir a la aventura de nuevas conquistas. Recordamos que se trataba de las tres carabelas que salieron de Palos, Huelva y les recitamos la poesía que hemos aprendido de esta ciudad andaluza. La clase de cinco años también le recitaron a su monitora la poesía dedicada a Córdoba y le gustó tanto que se emocionó.
Paseamos por el monumento dedicado a Julio Cesar, una especie de canales de agua con mosaicos de animales marinos. Seguimos paseando y recorrimos los jardines principales con sus chorros, naranjos… hasta llegar al estanque de los peces que es de lo que más gusto a niños y niñas, sobre todo a los más pequeños.
Salimos fuera y en los bancos de la entrada nos tomamos el desayuno estaban hambrientos.
Para terminar dimos un paseo hacia los baños árabes que están en los jardines de las manos. Estos baños estaban más nuevos pues los han arreglado y en ellos se oyen conversaciones de un califa con su hijo.
Sobre las doce y media volvimos hacia el autobús. Estábamos cansados. Habíamos visto y oído muchas cosas unas las entendimos más que otras pero seguro que ocupará su lugar en el largo proceso formativo y de aprendizaje.
Pero soy las familias quienes podéis completar y fijar este aprendizaje manteniendo las visitas a nuestro patrimonio, mostrándole la importante ciudad en la que viven que tiene un casco histórico Patrimonio de la Humanidad.
VÍDEO DE LA ACTIVIDAD
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