Los alumnos y alumnas de la Escuela Infantil Miraflores descubren la metamorfosis de los gusanos de seda, donde observan los diferentes estados por los que atraviesan hasta convertirse en mariposas. La curiosidad es el motor de su aprendizaje.
Hablamos de su alimentación. Vieron que ya había hojas en la caja y recordamos el cuento "La pequeña oruga glotona", gracias al cual ya sabían que comían hojas y no frutos, pasteles o salchichas.
Al principio, como eran muy pequeños, comían poquito.
Los cogimos con mucho cuidado, porque son muy blanditos, tocamos su piel suave y observamos sus patitas.
Vimos por donde comían y por donde hacían "caca".
Les dije que los gusanos no podían comer todo tipo de hojas sino solo las de morena. Cogimos una hoja de morena y vimos cómo era para poder localizar árboles con esas mismas hojas. Por internet observamos este tipo de árboles para buscarlos en nuestro barrio y así poder alimentar a nuestros gusanos.
Para poner punto y final a esta actividad, vimos una película sobre los gusanos de seda donde se apreciaba bastante bien como hacían los capullos y salían las mariposas, nos gustó bastante y aprendimos mucho sobre estos gusanillos "que salieron vivos de milagro". Gracias a las alumnas que los llevaron a clase.